domingo, 22 de septiembre de 2013

... y tú... ¿a qué te dedicas?

"Buenas noches", le dije justo antes de que se acercase para decirme: "Por cierto, ¿tú a qué te dedicas?"...
Yo me quedé pensando si valdría la pena explicárselo. Después de breves segundo, le dije: "Profesor de economía". Él se fue a dormir y yo todavía estoy despierto...
01:00 a.m.
Por eso en plena fase de insomnio, recuerdo que hoy mismo he estado debatiendo con mi invitado y primo hermano, el doctor en medicina israelí José Azulay, quien pasa unos días en Valencia por motivos personales, las relaciones entre los comportamientos humanos y los grados de mixtura hormonal que facilitan la aparición de diversas conductas que siempre se encuentran dentro de un rango previsible, incluso para aquellos que lo llaman "imprevisible".
Queda usted advertido de que a los judíos nos gusta mucho discutir, debatir y opinar, "descubriendo aristas en los círculos y curvas en los cuadrados". Viene de familia...
En dicha conversación hemos comentado que los aspectos emocionales y los biológicos empiezan a encontrarse y que los unos sin los otros no podrán ser analizados, ni utilizados ni aprovechados en un futuro inmediato, por no decir "ya!".
Mire por donde, al llegar a casa, leemos un artículo del prestigioso Eduardo Punset con el enunciado "¿Puede el pensamiento alterar nuestros genes?",  en el que dice textualmente: " Estoy sugiriendo que el viejo debate entre los partidarios de las estructuras genéticas y las estructuras del pensamiento está a punto de terminarse".
A vueltas con mi invitado, mi primo empieza a mencionar que en su país existen amplios grupos de personas procedentes de diferentes latitudes con un único nexo de unión: Su idea de vivir en Israel. Así mismo, me detalla lo "cabezones" y bruscos que son aquellos de origen ruso, lo sufridos que se muestran los procedentes de los países del golfo pérsico, la ausencia de rigor en los preceptos religiosos por parte de los provenientes del cono sur americano, etc... y claro! ante tal comentario, yo no me pude resistir y le razoné estas peculiaridades que a la vez son semejanzas entre unos y diferencias entre todos y cada uno de los individuos a los que se les preguntase por separado.
"Tengamos en cuenta que los equilibrios hormonales vienen ordenados por nuestro origen biológico y que en cierta manera, cuando las sociedades obtienen descendencia por motivos de homogeneidad, los resultados en el comportamiento poseen sospechosas similitudes entre sus miembros, cuando comparten un mismo entorno". Le dije muy seguro.
Mi buen amigo y primo israelí, complicó el anterior argumento al decir que con tanto mestizaje surgido del cariño que se tienen las personas, el "eterno" servicio militar y la inmersión lingüística al hebreo y al inglés en su país, se está acelerando el desarrollo de una nueva forma de ser que marca el comportamiento de los israelíes a nivel sociológico, sea cual sea su procedencia.
En términos generales son bruscos, sufridos y prácticos.
Personalmente estoy convencido de que ya conocemos a las personas "por dentro" y que solo se trata de "saber percibirlas"; a falta de una explicación contundente por parte de la biología, la cual nos permitirá cuantificar el "cómo soy" y de forma agrupada pero menos precisa, el "cómo somos".
Después de cenar, he leído un periódico donde se destaca una entrevista al neurobiólogo español afincado en USA, Rafael Yuste que dice, y cito textualmente, que: "No solo se borrarán los recuerdos sino que se podrá leer la mente de las personas y de los animales. No es magia. Dentro del cerebro hay neuronas disparando información. Si logramos ver cómo disparan y descifrar los disparos, podremos recrear la actividad mental de la persona que tengamos delante". Así mismo, el eminente Rafael Yuste menciona que: "Parece ciencia ficción, pero llegará. Va a suponer un cambio completo en la cultura de la Humanidad por que por primera vez nos vamos a entender por dentro. Estamos ante una nueva tecnología que tendrá que ser supervisada"; además de enunciar que "Llegará el día en que tu jefe sabrá lo que estás pensando" y que "Los circuitos cerebrales tienen miles de millones de neuronas: Estamos ante un televisor y solamente vemos un pixel de la pantalla. ¿Qué nos pasa? Que no nos enteramos de la película y por ello, queremos desarrollar técnicas para ver la pantalla completa".
Llegados a este punto, le comento a mi primo que resulta evidente que no sabemos de estas cosas tan complejas, pero que nuestras especulaciones sobre las individualidades y los colectivos poseen un núcleo que otros están estudiando desde apasionantes e inalcanzables puntos de vista.
Ya con ganas de ir a dormir, ni me atreví a mencionarle nuestros avances en la investigación del ADN emocional y el patrón numérico desarrollado para interpretar y corregir comportamientos propios y ajenos de forma anticipada, donde hemos descifrado más de 36.993 millones de "disparos neuronales informativos" para recrear el comportamiento anticipado de la persona que tenemos delante; ni mencioné la importancia de los avances de la Neurografía en la determinación del carácter de las personas en más de "2 píxeles", descubriendo contenidos ocultos a nuestra percepción física; ni nada de nada....
Antes de darle las "buenas noches", se acercó para decirme: "Por cierto, ¿tú a qué te dedicas?"...
Yo me quedé pensando si valdría la pena explicárselo. Después de breves segundo, le dije: "Profesor de economía". Él se fue a dormir y yo todavía estoy despierto.


jueves, 5 de septiembre de 2013

Otros lo llaman suerte!

Un pasito más hacia "la buena suerte"....

Aquí tiene usted dos "ADNs emocionales" distintos, los cuales evidentemente pertenecen a dos personas distintas: “20:31:38:26:30:23:10” y "15:32:40:22:24:19:06”.
Para mayor seguridad y así yo también me quedo más tranquilo, se lo traslado a un gráfico "SpiderWeb" donde podrá apreciar que a pesar de sus diferencias, su trazado y espacio ocupado es bastante similar.
Son diferentes estas personas? Sí! por supuesto. Reaccionarán de forma parecida ante los mismos estímulos? Claro!
Básicamente son 2 personas medianamente objetivas, muy dispuestas, con una gran inteligencia, notablemente espontáneas, con ganas de aprender, con un ego sobresaliente y ausentes de maldad.
Pero mi pregunta va más allá:

Podrán trabajar en equipo de forma eficiente y sin conflictos?
La respuesta es sí!, pero con algunas deficiencias que debería resolver una tercera persona al más puro estilo "catalizador".
Cómo tiene que ser usted si quiere "sacar el máximo partido a esta pareja"? pues su ADN emocional deberá reflejar una gran capacidad de influencia y poseer  sólidas habilidades para "plantear escenarios" diferentes ante una misma situación (creatividad espacial y pensamiento tangencial).
Ahora vamos a darnos un "baño" de realidad, usted y yo... y todo el que así lo desee...
Intuyo que empieza a percibir que no hay "jefe bueno" ni "jefe malo", sino "jefe adecuado".
La inmensa mayoría de conflictos entre compañeros de trabajo, cliente/proveedor e incluso entre amigos o familia, posee su origen en el ADN emocional.
Pero.... No se preocupe. Todo tiene solución!

El concepto clave es el que se determina como "Flexibilidad del ADN", ya que no existe un ADN bueno y otro malo, sino un ADN más flexible y otros más rígidos o inelásticos. Vamos... que estos últimos carecen de "cintura".
Por ello, los "líderes", empresarios y trabajadores deben mejorar dicha flexibilidad con el objetivo de poder adaptarse al máximo número de circunstancias cambiantes.
De esta manera se reducen los conflictos, los tiempos muertos, los tiempos lentos y cualquier suceso que repercute en la rentabilidad del negocio.
Una estupenda aplicación de dicha flexibilidad se da en las negociaciones, donde en un segundo usted puede perder la camisa y la de sus compañeros o.... comprarse un traje nuevo de marinero.
Piense por un momento (no le será muy difícil, imagino) que tiene que negociar un importante contrato con una persona que posee un ADN emocional con elevados rasgos de "Rebeldía" (Rb). Siempre "entrará al trapo" con un lenguaje subjetivo y singular ("Pues yo no estoy de acuerdo", "Eso no es así", etc...). Por lo tanto, prepárese para afinar ese muelle llamado flexibilidad.
Si cae en la fácil y evidente trampa de responder desde este mismo registro (Rb), los dos se asfixiarán quemando rápidamente todas sus energías como si tuviesen una bolsa de plástico en su cabeza mientras toman el Sol en la playa. Cada uno con su bolsa, claro está.
Quizás, usted no posea el rango suficiente del registro de ADN requerido para disponer de la suficiente flexibilidad,. Esto podría ocurrir y en ese caso, le aseguro que lo notará enseguida. Será como una partida de "strip-póker" donde a cada frase que diga o le digan, le quedarán menos prendas que ofrecer.
Ahora ya sabe que su capacidad para obtener rentabilidad se basa en gran medida en su propio "yo" gustosamente aderezado con el "vosotros". Créame...todo lo que le sucede es previsible. Usted ya lo sabe, lo intuye y lo sufre. El problema es que no dispone del catalejo apropiado. Otros lo llaman suerte!

lunes, 29 de julio de 2013

Ese pequeño río de lava... espere que el volcán entre en erupción...

Aquello que llamábamos enorme es inmenso y aquello que mencionábamos como pequeño es mínimo...
Los últimos avances efectuados por Jacobson Business Institute con respecto al "ADN emocional" y su manifestación están dando un vuelco a las teorías hasta ahora aceptadas con cierta resignación. Tengo claro que a nadie le gusta que le volteen a no ser que sea una amistosa forma de demostrarle públicamente agradecimiento y reconocimiento desinhibido por una labor espléndidamente realizada.
Nuestra conclusión es que dicho ADN es inamovible y que queda marcado a partir de la adolescencia, en 7 secuencias de 2 dígitos, utilizando un "lenguaje" numérico con profundo sentido semántico. Comentamos este tramo vital (adolescencia), no porque ya se tengan experiencias suficientes, sino por que bioquímicamente cada uno ya dispone de unas pautas individualizadas que gestionan los niveles reactivos de las diversas sustancias que definen nuestro carácter. Para hacer más comprensible estos términos, me permito ponerle dos ejemplos. Uno relacionado con la "semántica" y otro con las "reacciones" comentadas.
Con respecto a la semántica, ¿sabe usted qué significa DEFCON? Pues esta palabra proviene de "Defense Condition" y si le adhiere un "5", significa que estamos en paz... en cambio si le anexionamos un "1"... métase debajo de la cama y rece si es creyente porque en pocos segundos estará muy cerca de Dios. Lo mismo pasa con  la escala sismológica Richter o la escala Beaufort de la fuerza del viento. Como puede apreciar, algunos números nos ahorran muchas palabras. Por la misma regla, un ADN emocional 24:12:12:14:11:07:15 posee un significado muy diferente a un 32:32:40:32:36:28:28.
Con respecto a las reacciones, solo tiene que pensar en ciertas "drogas" o sustancias que con su intervención modifican el comportamiento de los humanos hasta hacerles temporal e intermitentemente diferentes.

Sabe realmente como es?
Por lo tanto, el "ADN emocional" existe y no se modifica nunca! Usted no podrá cambiarlo por más que lo intente.
Entiendo y acepto que en este mismo momento le vengan a la cabeza multitud de objeciones relacionadas con la evolución de las personas, su cambios de humor, manías, el aprendizaje, el éxito del coaching, los buenos consejos, etc... Todo baldío y estructuralmente inútil.
Pero no piense que le vamos a dejar así. Ni mucho menos... ya que en el fondo tiene usted razón...

Ese "ADN"  inamovible (las 7 secuencias de 2 dígitos) posee una característica relacionada con la "Ubicación", la cual se ve influenciada por otros dos atributos menores llamados "Intensidad" y "Tiempo" que conjunta e inversamente proporcionales, nos definen el factor de "Flexibilidad del ADN emocional". Como ve, aquello que llamábamos enorme es inmenso y aquello que mencionábamos como pequeño es mínimo.
De momento, ya ha dado media voltereta... Algo mareado? o simplemente desubicado? Pues agárrese...! por que ya ha entrado en Los Paneles Dimensionales, que no es otra cosa que ese incontrolable caudal que define dicha flexibilidad, en base a una intensidad y a un tiempo de exposición en una ubicación concreta.
Aquí, las tradicionales fórmulas físicas sobre la Velocidad, la Fuerza, la Aceleración, la Presión, etc... cobran más protagonismo del que nunca hubiese podido imaginar, ya que lo que hasta ahora se llamaban emociones son simples ubicaciones.
Estructura combinada Paneles Dimensionales
Le comento que existen 16 cuadrantes donde ubicarse y que son utilizados por todos ustedes, dispongan del ADN emocional que sea. Dichas ubicaciones están agrupadas en 4 bloques que determinan "desde dónde actúa", pero nunca, "cómo es". Lo primero obedece a los Paneles Dimensionales y lo segundo al ADN emocional. Dicha ubicación es a menudo, seleccionada por el individuo y en otras ocasiones, ese mismo individuo (podría ser usted mismo) es obligado a ocuparla. Para moverse con  soltura en estos "cuadrantes", se juega a algo muy parecido al ajedrez... en clave emocional... y con 3 zonas o rangos de riesgo (zonas radicales, zonas de tránsito y zonas positivas). El "juego" termina cuando todos los "jugadores" se encuentran en la zona positiva.
En fin... ahora ya ha dado la voltereta entera y mire que lo lamento, pero por hoy no quiero marearle más... en el próximo blog, ahondaremos en nuestros queridos "Paneles Dimensionales".
Apelando a su "poder Ad" (sí!... se acuerda? aquel que mide su capacidad de análisis...) o tercer dígito de su ADN emocional, le digo:
Resumiendo...
  • El "ADN emocional" existe y una vez establecido no se modifica nunca!
  • Dicho ADN está definido por la mezcla de grados o niveles de los 7 Poderes.
  • Las llamadas "emociones" son simplemente las diferentes ubicaciones que utilizamos.
  • Dichas ubicaciones son 16 espacios dinámicos que se interpretan desde los Paneles Dimensionales.
  • A las más de 36.993 millones de combinaciones de ADN emocional, se le deben adicionar estas 16 ubicaciones, generando un número muy cercano a 592.000 millones de conductas diferentes ya catalogadas.
Ahora parece que ya va en serio.... la difusión y dominio de estos elementos harán que el mundo de los negocios cambie para siempre. Ya se habla del CoachCare como la disciplina que modificará su percepción y habilidad para negociar, remunerar, motivar, aconsejar, contratar, hablar, pensar, evaluar, callar, ayudar, solucionar, adivinar, estimar, dirigir, gestionar, etc... dando algo más que la sensación de saber lo que los demás están pensando y lo que le van a decir y por consiguiente, lo que va a ocurrir.
Como hemos comentado anteriormente, se trata de una simple aplicación humanista de la Teoría de los Juegos al mundo de los negocios, que fue abandonada en la década de los 50's por parte de algunos "locos austriacos"... Le suena Drucker?
En Jacobson Business Institute hemos excavado, indagado, recuperado, estudiado y aplicado este "tesoro"... Espero que no venga acompañado con una "maldición"... :))
Lo que le aseguro es que ya nada será igual!... salvo los humanos... que no cambiamos...

martes, 23 de julio de 2013

La psicología desaparecerá...en la oscuridad!

En los años 50 (1950) grandes analistas (escuela austriaca) en estrategia empresarial intentaron aprovechar ciertas sinergias entre la Teoría de los Juegos y el Análisis Transaccional; pero el empuje de la escuela "alemana" de psicología disoció dichos elementos, hasta el día de hoy.
Hemos recogido aquello que quedó por consumar y lo estamos haciendo evolucionar para transmitir un modelo de pensamiento como es la Teoría de los Juegos aplicada a las relaciones humanas, bajo la denominación de CoachCare, donde el "ADN emocional" parece ser lo que más llama la atención cuando en realidad es solo la punta del iceberg.
Llegará el día en el que el comportamiento de los humanos se detecte por una sencilla analítica y no por un test; y que se pueda proponer un "ADN emocional" con mayor certeza que con las técnicas actuales, incluida la nuestra.
El método analítico (lectura de indicadores numéricos) cambiará en poco tiempo, créanme... pero las definiciones y postulados serán de lo más cotidiano. Algo así como en un análisis de sangre donde uno mismo puede "descifrar" algunas anomalías y que en el mejor de los casos se resume en un "Está usted hecho una roca".
La estructura del "ADN emocional" dispone de una secuencia numérica ascendente (azul) y otra descendente (roja). Esta última nos advierte de ciertas incomodidades y potenciales excesos en la posesión de dicho "poder".
Notará usted que la secuencia en rojo es mayor en los dos últimos poderes. Eso se debe a que son los de mayor riesgo  en "pasarse de frenada". Como puede comprobar todo posee "una cara y una cruz" sin responder a un modelo consciente, sino a una estructura creada donde se combinan diferentes "sustancias" químicas que nos hacen reaccionar de una u otra manera. Sabemos que a cierta edad no se "aprende" tan rápido, quedando las reacciones bioquímicas normalizadas, estabilizadas y customizadas para marcar nuestro "carácter".
Los elementos medidos en el "ADN emocional" disponen de una Intensidad que nos indica su grado o nivel variando la semántica y su definición. Tenga en cuenta que estamos acostumbrados a expresarnos con "palabras" y no con "números!"; pero aún así, agrupados, son relativos a (y perdónenme la brevedad... es un blog... y no puedo extenderme como quisiera):
Ob. Desde 0 hasta 32 y desde 32 hasta 19. Percepción objetiva y crítica enfundada en un lenguaje global y plural con un claro enfoque sobre acontecimientos y sucesos y no sobre personas.
Pr. Desde 0 hasta 32 y desde 32 hasta 19. Generosidad, protección, disponibilidad, sinceridad, etc.. con un formato donde se obvia el tiempo de exposición.
Ad. Desde 0 hasta 40 y desde 40 hasta 35. Capacidad de análisis, frialdad, conocimiento, cálculo, hermetismo, monotemático, toma de decisiones, etc... todo ello en un instante.
Nt. Desde 0 hasta 32 y desde 32 hasta 19. Superficialidad, naturalidad, espontaneidad, vulnerabilidad y todo aquello que tienen que ver con un sano comportamiento inmaduro e infantil.
Sm. Desde 0 hasta 36 y desde 36 hasta 27. Escucha activa, aprendizaje no selectivo y enfoque circular y panorámico.
Rb. Desde 0 hasta 28 y desde 28 hasta 11. Agresividad, expresividad, emoción, sensibilidad, egoísmo, lenguaje singular con una percepción estrecha y reducida al "yo".
Mn. Desde 0 hasta 28 y desde 28 hasta 11. Poder de influencia en los demás, convencimiento, persuasión, manipulación, sarcasmo, cinismo, especulación, etc...

Habrá podido observar que los 5 primeros son mayoritariamente positivos y los 2 últimos, igualmente negativos; pero no se deje engañar... mire...!
Ob. Genera distancia, no miente pero no dice toda la verdad; evita entrar en definiciones y se comporta como un "político".
Pr. Pesado, paternalista hasta el agobio... suele dejar sus tareas por hacer.
Ad. Nadie quiere comunicar con él. Puede llegar a ser irrespetuoso.
Nt. Imposible de controlar! Irresponsable y fácil de manipular.
Sm. Pasivo.
Rb. Ofrece garantía personal en lo que dice y hace.
Mn. Ayuda a los demás a alcanzar sus resultados.

Aquí tiene una muestra del ADN emocional normalizado para un Director financiero...
Usted ha sido tan amable de acompañarme a través de una lectura vertical "con solo las vocales (faltaría una multitud de refuerzos en las consonantes...)", pero la verdadera magia está en las mixturas, mezclas y mestizajes... algo así como el mundo de los colores!
De momento no los vamos a mezclar todos ni mucho menos... simplemente se trata de un ejercicio básico; o quizás, ni se merezca tal denominación (ejercicio)...
Haga el favor de contestar esta pregunta... si lo desea, claro!
"¿Cómo llamaría usted a una persona que se comporta con agresividad verbal, sincero e incapaz de hacer daño a un semejante?"... Yo le llamaría: "--, 26, --, 28, --, 26, --"... y esta otra... "¿Cómo llamaría usted a una persona que es fría, calculadora, inteligente pero que disfruta al influir en la opinión de los demás y en sus actos?".. pues, sería: "--, --, 32, --, --, --, 25".
Pues eso! entre las combinaciones de los "7 poderes" y sus niveles está el "secreto".
El que los posea, dominará el mundo... pero total, hay cosas más importantes... en serio!
Por ejemplo, al igual que por los ordenadores futuros fluirá la "sangre" (con diferentes componentes biológicos) para auto-regenerar memoria, procesos y mejoras no programadas, la biología empezará a "atacar" con fuerza los principios psicológicos, existiendo una sola oportunidad... "Que la psicología deje de obviar los avances científicos y se adapte a una nueva estructura de pensamiento donde el aprendizaje sea simplemente un matiz y no un núcleo".
Ya le había dicho que habían cosas más importantes..... como la Neurografía.... (en otro blog)....

domingo, 14 de julio de 2013

El perro no muerde... pero él lo sabe?

El ADN emocional será en breve la medición indispensable para determinar la tendencia actitudinal de cada persona, con todas las implicaciones, aplicaciones y consecuencias que este descubrimiento conlleva. Cada uno de nosotros estamos "marcados" por una secuencia agrupada de 7 series de actitudes identificadas con 2 dígitos que determinan que nadie es mejor que otro, sino diferente.
Aunque algunos crean que son capaces de modificar su comportamiento, la estructura básica nunca se ve alterada. Está en los "genes" y se configura como un "retrato robot".
Otra cuestión es la modificación "no genética"  que podría alterar o variar las reacciones, permitiendo cambios en la conducta del individuo en base a un obstinado y reiterado entrenamiento de acción/recompensa al más puro estilo Pavlov.
Por ejemplo, hoy mismo su curriculum se podría resumir en el ADN emocional complementado por su nombre, apellidos y formación académica.
Por ello, cuando una empresa requiera realizar una selección de personal, solo tendrá que proponer una secuencia de esas 7 cifras (por ejemplo, 32, 28, 31, 22, 14, 16, 10... le parece bien?), entonces nos pondremos a buscar en nuestra base de datos la persona que disponga de dicha secuencia o la más aproximada, como si de una huella digital se tratase.
A grosso modo podemos adelantar que cada una de estas 7 cifras corresponden a un nivel o grado de posesión de una serie de características.
En una lectura vertical (serie a serie) podemos determinar con gran precisión cómo es usted, cómo va a reaccionar y con quiénes se complementará. En cambio, en la lectura transversal entramos en el terreno de las combinaciones dinámicas y es ahí donde podemos marcar sus tendencias y prioridades en sus actividades personales y profesionales.
Por ejemplo y sin que sirva de precedente, haremos una "peligrosa, breve y parcial lectura vertical"..... el "32" inicial nos dice que esta supuesta empresa desea incorporar a  un individuo que sea sumamente objetivo, con una gran capacidad crítica y con cierta obsesión por generar distancia con su entorno como elemento defensivo. En sus intervenciones, su lenguaje deberá ser serio, sereno, correcto, concreto y ausente de naturalidad. Deberá obtener un extraordinario rendimiento de los especializados conceptos que domine para disponer de muy buena "entrada" a nivel relacional.
El "10" de la séptima serie nos ayuda a descifrar que buscan una persona carente de maldad, adaptable, fácil de manipular, crédulo y de reacciones tardías ante la pretensión de otros por influir en su comportamiento. Posiblemente el llamado "hombre de empresa".
Si lo que usted necesita es un biólogo, mire en la casilla de "formación académica"; pero sepa que este biólogo no trabajará fácilmente en equipo, dispondrá de escasa flexibilidad y será candidato a "pelota". Ahhh! el "14" de la 5º serie nos dice que es monotemático y que evita un aprendizaje expansivo. Vamos... un especialista! aunque ya le aviso que no posee una tendencia clara a ampliar sus conocimientos....
Lo más seguro es que las empresas busquen un tipo de persona que no saben definir. Es algo así como cuando el dueño de un perro le dice "No se preocupe, no muerde" y usted se queda pensando... "yo lo sé, el dueño lo sabe, pero... y el perro? lo sabe?".
Bueno! pues caso resuelto!!! Yo les recomendaría un "32, 30, 40, 26, 28, 16, 08" y listo!
Actualmente se han descrito más de 36.993 millones de combinaciones posibles (en concreto, 36.993.761.280), lo que se traducen en ese mismo número de comportamientos originales e individuales.
Evidentemente, un simple cambio de una de las variables del ADN emocional nos llevaría a un comportamiento sutil, mínima e imperceptiblemente diferente (imagínese que si en vez de disponer de un 32 en la primera secuencia, dispusiera de un 31) que nos obliga a disponer de cierta holgura.
Solo en casos de extrema necesidad o donde sea determinante la secuencia exacta (investigación antiterrorista o criminal, alta dirección, profesiones de riesgo y responsabilidad superlativa, etc...), dichos indicadores de magnitud desaparecerían para dar protagonismo a la secuencia real. De esta manera, resulta sencillo prever sus reacciones o las mías ante unos estímulos concretos; incluso sus capacidades ante situaciones cotidianamente variables.
Como ve,  podríamos hasta elegir al presidente del gobierno a través de su ADN emocional...... :))