lunes, 3 de agosto de 2015

4 Síndromes Directivos. Si lo puede saber antes... porqué insiste en saberlo después?

La técnica de los Paneles dimensionales ha ido cogiendo fuerza como método de descripción del comportamiento asumido en los equipos de trabajo. Dicho paneles disponen de 16 cuadrantes donde los individuos se posicionarán irremediablemente buscando un rincón donde ubicarse, siempre a través de interacciones comunicativas más interesadas que interesantes.
4 posiciones radicales y por lo tanto a evitar; 4 positivas que debemos buscar afanosamente y el resto, áreas de tránsito para convertir las primeras ubicaciones en las segundas.

En cuanto las posiciones radicales consiguen cierta permanencia, se convierten en comportamientos patológicos que disponen de un cuadro tan identificable como dañino.

En primer lugar, nos referiremos al síndrome del “Expresivo Agresivo” que nos lleva a describir un personaje individualista, rabiosamente impreciso; y en su comunicación, incesantemente discutidor.
A su favor, podemos decir que es capaz de activar cualquier propuesta, pero siempre en solitario ya que considera que “el tiempo dedicado a recabar la opinión de los demás, es tiempo perdido”. Su actitud se refleja en “mientras les enseño a hacerlo, ya lo hago yo”. Si la acción iniciada no alcanzase el éxito esperado, no le quepa la menor duda de que encontrará la causa rápidamente; le pondrá nombre, apellidos, ojos y cara; y no será él.
En los aspectos relacionados con el ADNe, esta persona dispondrá de una alta tasa en el registro “Rb”; muy cercano a “23” e incluso alcanzando el umbral de saturación expresado en “28”, mientras en el resto de registros se mostrará más moderado.

En segundo lugar, le voy a presentar al “Líder Intolerante”. Aquel que hace que los demás hagan y que paradójicamente nunca está satisfecho con lo que los demás hacen. No admite discusión y si la hubiese, la relacionaría inmediatamente con una falta de disciplina. Previsiblemente autoritario, pierde toda oportunidad de relacionarse con los que le rodean.
En los aspectos relacionados con el ADNe dispondrá de una alta tasa en el registro “Ob”, alcanzando un código entre “28” y “32”.

En tercer lugar, nos referiremos al “Amistoso Hostil”. Se trata de un excelente relaciones públicas que conoce todo aquello que está sucediendo o que esté por suceder. Manipulador y vengativo, intenta influir en los demás modificando los acontecimientos y buscando opiniones enfrentadas para poder representar ese papel de conciliador que tanto le entusiasma. Cuesta su tiempo detectarlo.
En los aspectos relacionados con el ADNe, aparecerá un código elevado en el registro “Mn”; probablemente entre “23” y “28”.

Por último, vamos a prestarle atención al “Analítico Inaccesible”, cuyo comportamiento se basa en crear, disponer y no compartir información. Extremadamente inteligente, no habla más “idioma” que el suyo propio, consiguiendo tal distancia con sus interlocutores que aparentemente no se puede contar con él.
En los aspectos relacionados con el ADNe, dispondrán de una elevada intensidad en el registro “Ad”; entre “35” y “40”.

Como puede apreciar, el uso del ADNe es lo que marca la diferencia entre sacar la misma conclusión meses antes o meses después; con suficiente anticipación o habiendo sufrido dichos comportamientos durante un tiempo con las desastrosas consecuencias que esta última opción conlleva.